‘El Drogas’, músico: «A través del miedo han hecho que ahora seamos mucho más fáciles de manejar»

por Ricard Jiménez

 

Sábado, 16 de octubre de 2021. Enrique Villarreal Armendáriz (Pamplona, 1959),​ más conocido con el nombre artístico de «El Drogas», es un músico conocido principalmente por haber sido durante casi treinta años cantante y bajista de la banda de rock Barricada. El Drogas es también el nombre de su actual banda. Ha sido sin lugar a dudas uno de los máximos referentes del rock a nivel nacional a lo largo de las últimas décadas, y acaba de editar ‘189 escritos con una mano enferma‘, junto al disco ‘El largo sueño de la polilla‘, desde donde sigue trabajando nuevos registros. Con él hemos hablado sobre sus últimos trabajos, su trayectoria y mucho más. Una mano enferma que sigue aportando lucidez y que más que polilla se convierte en el despertar más corrosivo cuando ladea la mirada.

En los últimos años ha sacado un quíntuple disco, ahora un disco – libro… ¿Qué es lo que te está pasando últimamente? 

Este último trabajo no estaba en los planes. Ha sido todo un poco la vida, que es la que te pone en este camino y de repente te manda de una patada a otro que no pensabas visitar. Ha sido un poco eso. Habíamos sacado el quíntuple disco y cuando eso estaba bastante encarrilado, lo que iban a ser los 2 o 3 años siguientes, entre presentaciones y preparación de festivales, pues llega la pandemia y era el estar encerrado en casa de manera obligatoria, porque cuando es voluntaria pues bueno, eso es otra cosa, ¿no? Pero todo esto ha llevado a tener que deshacer los planes que tenía y comenzar con otra historia. 

No sé cómo lo verás tú, pero externamente se aprecia un cambio, digamos, en la sensibilidad de tus trabajos, y sé que la literatura te ha marcado en varias etapas de tu vida… Yo al escucharte pienso que no sé si es esta la influencia la que te ha llevado por nuevos caminos, a indagar en otros registros, más profundos por llamarlo de algún modo. 

Todo lo que te va sucediendo en la vida de alguna manera te influye, Unas veces influye mucho, mucho y otras que influye muy poco, pero todas influyen. De ser un lector empedernido de cómics durante mi adolescencia, comienzo a leer novelas, de ahí paso a leer cuentos, leyendo poesía, que es un poco donde ya me quedo colgado. Me pasa un poco como con la música, que puedes escuchar un tipo de música, voy escuchando cosas que me van pasando, gente de otros grupos con los que has coincidido, no sé, y todo esto claro, claro que cuenta. Con el paso del tiempo vas creándote, regodeándote en una forma de hacer que se concreta por todo lo que has ido mamando. 

Esto no sé si te lo puedo preguntar porque hay cosas que son más personales, pero también me gustaría preguntarte por cómo Influyó  la trágica muerte de Boni después de tantos años sin veros, su enfermedad, vuestro reencuentro…

Con Boni, la verdad, que ha sido una relación muy especial desde que comenzamos los directos de Barricada. Bueno… Desde antes ya, porque comenzamos a componer canciones, la música y la letra… En fin, recuerdo como si fuese ayer todo, todos los pasos que hemos ido dando y luego, bueno… El distanciamiento a partir de un momento dado y, después, el final en Barricada para mí fue demoledor.

Del reencuentro yo suelo comentar que para mí, ese reencuentro, supone que estos dos últimos años antes de su muerte volviera a reencontrar a la persona, no tanto a mi compañero en Barricada, que también, sino a la persona. Esto me hizo darme cuenta, con el paso del tiempo, de que ese momento es para mí el fin de Barricada. No digo que Barricada ya se quede como, en fin, como algo etéreo, sino que es parte muy importante, pero me reencuentro con la persona, con Boni. Tras el reencuentro hemos hablado de muchísimas cosas en estos últimos dos años, de forma distinta, otro tipo de relación.

Todos estos cambios que has ido pasando, desde Barricada hasta que te lanzas en solitario, y estos últimos trabajos, que son bastante diferentes, ¿han sido bien aceptados entre tu público o has notado algún tipo de rechazo? A veces se tiene la sensación del artista como algo abstracto, puro…

Ha habido de todo. El público no se puede generalizar, hay de todo… Yo lo que sí puedo decir es que desde que comenzó la trayectoria de El Drogas hay mucha gente que me sigue porque sabían de mi salida de Barricada, otra gente que comienza a entender de alguna manera esa voz personal, digo voz, no en el sentido físico, sino en el sentido más de pincelada. Y bueno, pues, ahí hay gente que se ha ido enganchando y que busca lo que voy haciendo en el presente. Lo que sí tengo claro es que siempre procuro tener los trabajos a un nivel que me permita mirar a los ojos a la gente. 

Siempre dices que él último trabajo que sacas es tu penúltimo trabajo y esto, por desgracia para los que te seguimos, algún día será verdad… ¿Se va acercando ese momento o aún te ves con fuerzas?

Me imagino que sí, porque con 62 años… No me importa demasiado. He vivido bastante intensamente mi oficio y, además, con un placer que… A veces hasta me jode decirlo, pero es así… Porque estamos en un país que es muy jodido vivir de lo que a uno le gusta, ¿no? Pues yo, digamos que lo he conseguido y aún lo llevo a cabo. Yo no sé los años que me pueden quedar, pero si me quedan 5 o 7, que sean tan intensos como estos anteriores y a partir de ahí sin problema. He vivido lo que tenía que vivir.

El otro día vi… Creo recordar que era Almodóvar… En una entrevista le hacían una pregunta sobre feminismo y allí, en las redes, leí una crítica que me pareció muy buena y es que a estas personas nunca se les pregunta por lo que hay detrás, que siempre suele ser una mujer. En tu caso es Mamen, tu compañera, y tú, que siempre has tenido una mirada feminista de la sociedad y ya ha sido reivindicativo con el tema, quería preguntarte ¿qué relevancia y qué importancia ha tenido andar junto a ella durante todo este tiempo?

Es para mí una maestra de la vida, de mi propia vida. Una persona con la que comenzó una andadura hace… 40 años que vivimos juntos. Hemos tenido un proyecto vital muy potente. Nos vamos a vivir juntos el mismo año que se funda Barricada en el 82 y a partir de ahí… Pero yo llevaba con ella desde el 78. Ella sabía ya que yo quería salir de la mili como fuera y crear un grupo que se llamara Barricada… Hemos tenido dos hijos, ahora tenemos dos nietos. En fin, esto no se resume fácil, pero han sido muchas experiencias, unas muy buenas y otras malas, pero de las malas, donde hemos metido la pata, hemos aprendido un montón. 

Yo lo tengo que reconocer, no se me caen los anillos y, realmente, si he tenido facilidad para moverme dentro de mi oficio ha sido porque está ella. Yo no cambiaría por nada ningún año de mi vida, pero sobre todo estos 10 últimos años. No los cambiaría, y los cambiaría mucho menos porque me voy de viaje con ella. Ya los hijos se hicieron mayores y hacemos los viajes juntos a los sitios donde se va a tocar… No sé… Nos apetece. Llevamos un ritmo muy asimilado y la verdad que es una gozada. 

Otro proyecto en el que has estado metido es el de Motxila 21, con chavales con diversidad funcional, también viviste el proceso y la etapa del Alzheimer con tu madre y ahora que está sobre el panorama político el debate sobre la sanidad mental pública creo que quizá tienes un punto de vista formado al respecto.

Yo tengo criterio sobre muchas cosas, pero no podría dar solución. Eso sí, sé que la solución no está en callar, que es lo que se ha hecho hasta ahora. Estoy convencido de que no todo el mundo decide quitarse la vida por la misma causa, pero si tuviésemos empatía con su propia soledad, seguramente les ayudaríamos mucho a poder salir de ciertos pozos. 

Creo que es así porque pasa con otro tipo de enfermedades y otro tipo de situaciones. Lo tengo muy asimilado con, por ejemplo, el Alzheimer. Cuando diagnostican a tus familiares se te cae el mundo, no sabes nada al respecto, eres un ignorante y en cuanto comienzas a conocer gente, te hablan y a la vez te escuchan tus sentimientos te ayudan un montón. La enfermedad sigue su curso, pero tú ya lo afrontas de otra manera. Creo que con la salud mental pasa exactamente lo mismo. 

No hay que esconder a nuestras personas que tengan otra forma de ver la vida o, incluso, una forma de ver la vida que nosotros no entendamos. Escuchemos y, a veces, simplemente con ese hecho, creo que se ganaría mucho. Aparte, hay que invertir mucho más en profesionales, en la sanidad pública, eso por supuesto, que realmente es lo importante de todo esto, ¿no? 

En la introducción de tu documental dices, qué miras “torcido para ver la vida equilibrada” y tú siempre has tenido un punto de vista  corrosivo. Naces en el “barrio conflictivo”, creces dentro de movilizaciones obreras… ¿Cómo ves el panorama actual?

Pues el panorama actual… No sé, lo veo torcido, porque igual he querido mirarlo de manera recta. Ese es un defecto físico que tengo en un ojo y entonces hace que tenga que torcer mi eje central para poder ver el mundo horizontal.

¿Que cómo lo veo? Creo que jodido, porque se ha avanzado muy poco intelectualmente, sobre todo con respecto a temas, como puede ser lo que antes comentabas del feminismo. O sea, todo el terrorismo machista que sigue existiendo… El feminismo es un concepto que debería venir ya del plan educativo familiar y, a la vez, con el plan educativo de la pública. 

Pero del mismo modo son muchos los temas… El tema del racismo no acabo de entender por qué no somos capaces de aprender y empatizar con personas que han tenido que dejar su lugar de nacimiento, no tanto por hacer turismo, sino por buscar un nivel de vida óptimo para esas personas y sus respectivas familias. No acabo de entender por qué no entendemos a estas personas…

Hay términos que aún hoy en día… Hace poco ha sido la Hispanidad, ¿no? Hostias parece que te metes con la Hispanidad y ya te saltan con lo de España, España, España y arriba España. Sí, esto tiene que ser de España, que sea España, pero no me metas a la gentuza con su pulserita bicolor, que luego paga los impuestos en Belice o en paraísos fiscales y se les llena la boca cuando sacan el puro y sacan el cuerno del toro, que se le llena de palabras huecas y absolutamente estúpidas y de eso surge la extrema derecha.

Se nota que aquí Franco, pues, ganó la guerra, aunque perdió el golpe de Estado, pues ganó la guerra y no permite que se salga de la estupidez y del oscurantismo al que nos llevó. Esto continúa todavía aquí… Hay muchísimos restos por las comunidades de todo el país, a lo largo y ancho de este.

¿No tienes la sensación que no es que no hayamos entendido, sino que con la aparición de esta extrema derecha actual se ha y vamos en retroceso? 

No creo que se haya agudizado. La verdad que yo, analizando la historia de España, entendida como la de un país concreto, siempre hemos sido muy racistas con los gitanos. Lo hemos tenido aquí, lo que pasa es que ese racismo para nosotros lo hemos normalizado tanto que no nos parece racismo, pero contra el pueblo gitano ha habido auténtico racismo.

Pero, si miramos más hacia atrás, venimos de la creación de lo que es España como país, que los Reyes Católicos expulsan a las personas que hacen el acueducto, el alfabeto, las matemáticas, la ciencia, la astronomía… Árabes bastante más cultos que los personajes que se encuentran en la propia península cuando vienen. La posterior convivencia durante ocho siglos y estamos cogiendo todo el rollo este de la reconquista, que siempre ha sido una especie de pelea, yo creo que, contra uno mismo… O sea, no sé, hasta que no aprendamos a reconocer que venimos de los habitantes de África me parece que no hay mucho que rascar. Parece que aquí llegó un platillo volante y echó un espermatozoide y ale ya nacimos con la cabra.

Es todo tan y tanto español… A mí no me cuadra eso, pero hostia, ahora han puesto hasta a Cantó en la oficina esta del español, y tal cual lo que veo es un gran océano de imbecilidad.

¿Eso lo pongo?

Como quieras, es cosa mía, te lo digo yo, eh, porque eso es una descripción… Seguramente Toni Cantó sea una persona con un nivel intelectual impresionante, tanto que no lo entiendo, entonces, yo lo veo como un imbécil.

No me importa que lo pongas porque realmente es lo que pienso y bueno… Te digo este como te podría poner otros casos. En fin, que el tema político, de políticos y políticas, hostia… Deja mucho que desear en este país. 

Fíjate si hay que seguir escuchando estupideces, de manera continuada, simplemente cada vez que se va a subir el salario mínimo interprofesional. Me parece de puta vergüenza.

Ya que hablas de Hispanidad… El otro día Monedero, uno de los fundadores de Podemos, hablaba también de que uno de los problemas de la izquierda es que hemos perdido estos símbolos nacionales y decía que hay que resignificarlos.

Que haga lo que quiera Monedero. Realmente, los símbolos, me parecen una mierda vengan de donde vengan. Para mí un símbolo es la señora mayor del barrio que ha peleado toda su puñetera vida para sacar una familia numerosa adelante. 

Yo estoy más por la bandera republicana y tal. De hecho, hay personas que me regalan una bandera republicana con todo el cariño del mundo, pero al final eso no es lo que me importa. Lo que me importa es lo que esas personas llevan, su tiempo empleado en encontrar los restos de su padre o de su abuelo, que era maestro y que precisamente por intentar que la educación fuese pública lo asesinaron. Eso es para mí el símbolo, lo demás es una auténtica mierda.

A base de símbolos es como nos cierran la boquita los psicópatas que quieren vivir a costa de las hostias que nos damos entre nosotros. Pues no, no me interesa para nada recuperar ninguna bandera, ninguna cruz. No lo que me gusta no son símbolos, son las personas y sus acciones.

Tú hiciste un trabajo centrado en esto que comentas, en la memoria de represaliados, en las fosas comunes, etc. Además, creo recordar, que en varias ocasiones comentabas que es algo que desconocías y que te enganchó y ¿es quizá a través de esta memoria que debe reconstruirse la patria?

Yo quiero que las personas tengamos memoria de lo que ha habido, lo mismo que me puede interesar cómo los nazis comienzan su purga. ¿Cómo no va a ser interesante? El tener conocimiento de que existen hornos crematorios, de que hay campos de concentración. Pues aquí exactamente igual. Exactamente igual. O sea, ¿por qué sucede lo que sucede en el en el 36? Y también antes, y también después. La historia contemporánea en este país, siempre no olvida su origen, que está en la Segunda República y ¿por qué se da la Segunda República? Ahí comienza nuestra historia contemporánea. En ese trabajo hago mucho hincapié, sobre todo en la parte en que perdió… Que perdimos todos y todas, porque hasta gente que se ha pensado que ganó, perdió.

Ahora  está todo este tema del aborto el tema del divorcio, el tema de la educación, tanto intelectual como científico… Es la ostia que ahora la mujer comience a ocupar un lugar protagonista también en la sociedad española y todo eso comienza ahí y todo eso se termina con la victoria de la guerra civil del bando de Franco, el  fascista.

Lo que vengo a decir es que yo no me centro tanto en batallas, que también puede ser interesante, sino en la represión que sucede en la retaguardia. ¿Y quién ejerce esa represión? ¿Sobre quién? ¿Por qué? En fin, también hay que decir aquí que el Ejército español, contemporáneo o moderno, también que gane la guerra contra su propio pueblo… Tampoco tiene mucho motivo de orgullo… Pues luego, hostia, al desfile de la Hispanidad, heredado del día de la Raza… No me toques los cojones… Se me hace muy duro sobre todo por las personas que fueron asesinadas por ello.

El Ejército contemporáneo nos permite que no tengamos que echar la vista tan hacia atrás para ver sus actuaciones… Irak, Afganistán…

Todo eso, fíjate, si hay ahí para analizar y para analizar a un personaje como Aznar… Hostia. Pues está todo muy relacionado, claro que sí. 

Dejando un poco de lado la memoria, ¿cómo ves el futuro? El futuro de esta persona de barrio, de la clase trabajadora. 

Pues… No lo sé. Yo pienso que a partir de los años 80 comienza una fórmula de actuación por parte de lo que pueden ser los poderes, tanto gobiernos como poderes fácticos, en los diferentes Estados, o sea, no solo me voy a centrar en el Estado español, de ir individualizando al individuo, valga la redundancia, y a partir de ahí la palabra o el término asociacionismo comienza a debilitarse. Entonces somos mucho más fáciles de manejar ahora, pues nos meten el miedo a la pérdida del trabajo, el miedo a decir lo que pienses porque te pueden meter una multa o la ley mordaza,  a manifestarnos de esa manera comunitaria por problemáticas concretas, bien sean de barrio, bien sean laborales, entonces, ese miedo lo manejan muy bien y creo que han tenido capacidad de llevar a cabo todo esto por el camino que han querido con la ayuda solicitada de los medios de comunicación, que realmente son empresas de comunicación, empresas que manejan la comunicación o quizás sean empresas de incomunicación.

Ricard Jiménez es redactor en Contrainformación y Spanish Revolution. Miembro de la dirección de Nueva Revolución y coordinador de Internacional y entrevistas. Presentador La Zurda TV en La Zurda TV.

Sea el primero en desahogarse, comentando

Deje una respuesta

Tu dirección de correo no será publicada.


*


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.