Desde Andalucía Por Sí Huelva hemos visitado la zona 1 de las balsas de fosfoyesos, esta antigua balsa de residuos de la industria química de Huelva para conocer de primera mano la situación en la que se encuentra, las verdades que se muestran a la hora de entender, que es para las instituciones y las empresas químicas de Huelva una restauración en unas tierras contaminadas. La zona comprende una distancia aproximada desde las Marismas del Titán hasta las traseras de la antigua estación de Renfe Huelva-Sevilla, en ellas vemos como se ha ejecutado un plan milimetrado para tapar con diversas capas de tierra los residuos químicos. Viendo en algunas zonas varios metros de tierra, en contraposición a otras con solamente escasos centímetros de tierra, que dejan al descubierto una superficie blanca donde no crece ni una pizca de hierba, como toda la zona se ha reforestado con especies arbóreas de rápido crecimiento con la idea de ocultar la imagen de terreno inhóspito, todo esto mantenido con kilómetros de tuberías por goteo.
Nos vendieron que esa zona estaba libre de contaminación, que se había recuperado la situación anterior a la actividad industrial, que las marismas del Titán no se verían afectadas y que la pesca se recuperaría, pero todo eso es mentira a la luz de las imágenes dantescas de basuras, escombros y arroyos de aguas verdes, que se están vertiendo diariamente a las marismas colindantes de esta zona. Sabemos que la naturaleza se abrió paso en tal entorno encontrando un gran número de especies de fauna a nivel local, en esta zona encontramos un punto visible de agua dulce donde ahora se sitúa la nueva estación de Renfe en la cual abundaban las aves tales como espátulas, garcillas y una importante población de sapillo pintojo, toda esta zona de belleza natural fue arrasada cuando la empresa constructora colocó escombros de hormigón encima de la zona de agua eliminando toda presencia de humedal en la zona, la cual ahora está siendo usada por las personas que malviven en esta zona con chabolas para la extracción de aguas.
Creemos que es hora de dar un paso adelante en la defensa de una restauración real, queremos ver a unas instituciones que defiendan la calidad de vida de los ciudadanos onubenses, no las instituciones que vemos hoy en día buscando la manera de facilitarle la vida a Fertiberia, con planes de construcción de planta de placas solares en la zona o el gobierno de la nación autorizando el tapado criminal de todas las balsas de fosfoyesos.
Las especies de fauna que ahora pueblan está contaminada zona tienen que convivir con la amenaza constante de la caza ilegal, la cual fue puesta en conocimiento el día 19 de mayo en el SEPRONA de Huelva en el cual se aportaron fotografías y testimonios de la presencia de varios problemas como son:
Zonas de escombros peligrosos los cuales están repartidos por toda la zona, encontrándonos los primeros en las traseras de la Escuela de Arte León Ortega incluyendo residuos con amianto.
Abundancia de arquetas sin tapa muchas de ellas con varios metros de caída, de las cuales se han rescatado numerosas especies de fauna protegida (sapos, salamandras, culebras, mamíferos muchas de estas especies amenazadas gravemente a nivel local) las cuales estaban en malas condiciones o muertas.
La presencia de individuos que se dedican a la colocación de cepos de caza para la caza de conejos y zorro, la presencia de una persona que caza con escopeta acompañada de perros y la presencia de una persona en la zona de Renfe que se dedica al destroce de las madrigueras de conejos aludiendo “a que si no hace eso el perro se le queda encajado en las madrigueras”.
En las Marismas de la zona encontramos una contaminación adicional proveniente de los vertidos de aguas fecales directos a las aguas, viendo cómo se intoxican de tales aguas las aves de referencia de este entorno como garzas, espátulas, cigüeñuelas y demás especies limícolas, encontrando alguna imagen dantesca cuando baja el nivel de agua de cientos de toallitas, compresas y pañales en los márgenes
Viernes, 11 de junio de 2021.
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