Onubenses por una Sanidad Pública de Calidad en contra del Hospital Materno Infantil en la clínica Blanca Paloma

Imagen de archivo

21/12/2021

Desde Onubenses por una Sanidad Pública de Calidad creemos que las recientes declaraciones en un programa de televisión de la Sra Delegada del gobierno andaluz, afirmando que el futuro Hospital materno infantil de Huelva se ubicará en un edificio «que se puede comprar o alquilar » y dejando entrever la posiblidad que sea en las antiguas instalaciones del Hospital Blanca Paloma, marecen una respuesta enérgica.

Como, incomprensiblemente, dicha respuesta no ha sido ofrecida por la actual Delegada de Salud, ni ninguno de los actuales gestores sanitarios, creemos necesario exponer los argumentos por los que creemos que dicha propuesta, enésimo ataque a nuestra Sanidad Pública, es absolutamente descabellada , inviable y, sobre todo, peligrosa para nuestras mujeres y niños.

En primer lugar, en la situación actual en que la escasez de especialistas y en particular de Anestesistas (muchos de los cuales han optado por el trabajo privado, tras los incentivos del gobierno andaluz), retrasa las intervenciones quirúrgicas en nuestros hospitales u obliga a la infrautilizacion o cierre de los del Vazquez Díaz, parece poco razonable plantear un nuevo centro donde se precisaría de otro gran número de ellos para atender partos, cesáreas, epidurales o llegado el momento Cirugía infantil.

Segundo, la distancia existente entre dicho centro y el Hospital de Referencia (J.R. Jimenez) alejaría más de un kilómetro los servicios generales que son tan necesarios para la atención de estos pacientes. Sería el único caso de entre los Maternales de Andalucía, siempre anexos al Hospital de referencia (con la excepción de Málaga donde se trata de un hospital completo e independiente del centro “madre”).

Se nos hace difícil imaginar un mecanismo ágil para trasladar por ejemplo, todas las muestras de sangre que serían necesarias a diario y, sobre todo, aquellas urgentes o a deshora.

Otras pruebas complementarias como una Resonancia, un TAC o un Electroencefalograma ) necesitarían también un traslado, a veces urgente, que colapsaría nuestro sistema de ambulancias y aumentaría los riesgos de las pacientes.

La cirugía Ginecológica, no pocas veces, precisa de la participación de otros especialistas en el acto quirúrgico (Cirujanos Generales, Vasculares o Urólogos), que se encontrarían a una distancia y en unos tiempos inasumibles con una intervención ya comenzada.

La interconsulta con otros especialistas (por ejemplo un Infectólogo para un niño con infección grave, un Endocrino para los diabéticos, etc) tampoco sería ágil ni pronta, necesitando dicho especialista dejar de atender a alguien en el Hospital, para su traslado (incidimos de nuevo en la cortedad de nuestras plantillas de especialistas).

Existen múltiples complicaciones graves del embarazo y el parto, ( Eclampsia o Peeclampsia, sepsis, fallo cardíaco…) que ponen en peligro la vida de mujer y feto y necesitan ingreso en UCI (¿quizás la Sra. Verano propone montar allí una UCI de adultos, cuando actualmente no se puede cubrir ni la de Riotinto?).

En no pocas ocasiones también ocurren hemorragias masivas postparto que ponen en peligro de muerte inminente a la mujer, se precisaría activar de manera inmediata un protocolo de Transfusión Masiva, su inestabilidad no permite un traslado al J. Ramón y los productos de la sangre que precisan estarían a una distancia y en unos tiempos excesivos para salvarlas.

A veces la única solución es embolizar las arterias del útero, salvando la vida a la mujer y preservando su útero o quitar el útero y dejar estéril a una mujer que, quizás, quisiera tener más hijos. Si bien esta última práctica es la que se viene realizando en Huelva, a pesar de las denuncias, parece que, a muy corto plazo, por fin, se va a contar con la posibilidad de realizar la embolización a cualquier hora del día o de la noche, necesitando unas instalaciones muy especializadas que están sitas en el Juan Ramón.

Hay que recordar también que estamos hablando de un edificio que sufre, como poco, graves deficiencias tanto de suministro de agua, como de ventilación (motivos por los que no se pudo habilitar para la COVID).

Y por último, nos parece que cambiar el ambicioso proyecto inicial de unos 20.000 metros cuadrados y dotación completa, por un edificio de 8000, anticuado y deteriorado es un nuevo desprecio a la Sanidad Pública que Huelva merece.

Por todo ello, pedimos a la Delegada de Salud (cuyo objetivo prioritario en su nombramiento era la construcción del Materno-infantil «que Huelva merece»), salga al paso de las declaraciones de la Sra.Verano, desmintiéndolas o de lo contrario, presente su dimisión por aceptar una situación, cuando menos, peligrosa para nuestras mujeres y niños.

ONUBENSES POR UNA SANIDAD PUBLICA DE CALIDAD

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