Martes, 26 de octubre de 2021. Todo indica que lo que menos le importa al gobierno del PP-Ciudadanos en la Junta de Andalucía es la salud de los andaluces, o por lo menos, dotar de los mínimos recursos a la sanidad pública.
Hace unos días leíamos, atónitos, que la Junta de Andalucía iba a despedir, no renovándoles sus contratos, a más de 8.000 trabajadores de los hospitales públicos de Andalucía. Si ya estábamos fatal, imaginaros como vamos a estar a partir de ahora.
Este anuncio se producía, además, un par de días después de que el propio presidente de la Junta, el Sr. Moreno Bonilla, afirmara de forma rotunda en la última sesión de control en el Parlamento andaluz, que ninguno de los sanitarios/as iban a ir a la calle.
Pues fijaros lo poco que vale la palabra del Sr. Moreno Bonilla, la de hoy, no vale para mañana.
Como excusa señaló la retirada de la transferencia del Estado para el apoyo Covid. Pero es una simple excusa falsa, ya que la sanidad pública andaluza ha pasado a ser una de las peores, o la peor, entre las de las Comunidades Autónomas de nuestro país, independientemente de esas transferencias.
Y lo podemos comprobar desde lo cualitativo y desde lo cuantitativo.
Desde lo cuantitativo, que es totalmente objetivo, en 2019 antes de la pandemia, puedes comprobar en los presupuestos comparativos por Comunidades Autónomas, que Andalucía es, después de Madrid, la región con el presupuesto per cápita más bajo en salud pública. Mientras que Andalucía dedicó 3.797 € por habitantes, Aragón lo hizo en 4.201 € por habitante, Extremadura 4.906 o el País Vasco 5.414 €. Para no aburrirte, en 2020 los datos eran similares y Andalucía también era la penúltima región en gasto sanitario por habitante, solo teníamos a la Comunidad de Madrid por detrás.
Desde lo cualitativo, que es cierto que es subjetivo, estarás de acuerdo conmigo que nunca, nunca, la atención primaria ha estado peor. A ti te pasará, igual que me ha pasado a mí, que es imposible que te den cita para el médico de familia, ya que cuando entras en internet o por la App a pedir cita, nunca hay cita disponible. A ti te pasará, igual que a mí, que si quieres ir a un especialista, deberás esperar cinco, seis o doce meses, por lo que algo leve se puede convertir en grave.
La atención primaria ya se la han cargado, ahora van por la Hospitalaria, parece que es una clara estrategia de ir desmontando el sistema de salud público, de calidad, universal y gratuito, e implementar un sistema sanitario neoliberal, como el estadounidense, donde prima la sanidad privada.
De esta forma, a partir del 1 de noviembre, los hospitales andaluces tendrán 8.000 trabajadores menos. Aquellos a los que llamábamos héroes/heroínas hace solo unos meses, ahora el gobierno de las derechas de la Junta de Andalucía los echa al paro.
Pero lo que peor me sabe, es que la sociedad andaluza, en vez de salir a la calle a manifestarnos contra esa lamentable decisión (igual que salíamos todas las tardes a los balcones para aplaudirles y agradecerles sus esfuerzos) nos quedemos tan tranquilos en el salón de casa.
Creo que debemos cambiar. Cambiar de gobierno y cambiar nuestra actitud.
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