Colombia, ¿resistirá la Paz?

Ivan Duque acaba de ser elegido Presidente de Colombia. Al protegido del ex presidente Alvaro Uribe le tocará gestionar un Plan de Paz que no quería, pero que fue aclamado por la comunidad internacional y que le dio a su predecesor, Santos, el Nobel de la Paz.

Se ha hecho con la presidencia en una disputada campaña que acabó muy polarizada, como polarizado está el mundo entero. Los candidatos más moderados, los que más garantías daban para el mantenimiento de los acuerdos firmados -teniendo en cuenta la división que generaron en el país- fueron derrotados en la primera vuelta, dejando la elección entre Gustavo Petro, ex guerrillero defensor a ultranza del acuerdo y respaldado en las elecciones por las FARC (que no deja de ser una de las partes firmantes), y el elegido Iván Duque, firme defensor del no en el referéndum que, no obstante, ha moderado mucho su discurso y solo habla ahora de correcciones al Plan firmado.

Personalmente creo que el proceso continuará. Con algún que otro altibajo, pero continuará. Si se ha hecho con la presidencia es gracias a los votos de centro y esto le hará moderar su posición, como hemos podido entrever en la campaña de la segunda vuelta. Tampoco debería olvidar que la izquierda ha obtenido el mejor resultado de su historia en aquel país y que más de un 40% de los electores votaron por Petro al que al principio de todo el proceso las encuestas daban como un candidato marginal.

Tampoco le vendrá mal a Duque distanciarse de su mentor Uribe. Necesita ganar legitimidad en un contexto dividido pero que mantiene más vivos que nunca los viejos problemas jamás resueltos del país. La producción de cocaína en Colombia, por ejemplo, es la más alta de su historia, mayor que en la peor época de Pablo Escobar.

El nuevo Presidente es un melón por calar (como se dice en mi tierra) del que no deberíamos esperar grandes proezas pero que tampoco creo que desandará el camino recorrido. Por tanto creo que lo que toca es esperar a ver qué dirección toma y rezar para que a Trump no le dé por meter sus narices aquí también.

Javier Polo Brazo

@JavPolo