El histórico líder de Izquierda Unida, Julio Anguita, ha muerto hoy a los 78 años de edad en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, donde fue ingresado el sábado 9 de mayo tras sufrir una parada cardíaca en su domicilio. La izquierda alternativa pierde hoy a uno de sus referentes, que ha dejado una honda huella en la democracia española.
Decretados 3 días de luto oficial en #CórdobaEsp por el fallecimiento del exalcalde Julio Anguita. Descanse en paz. pic.twitter.com/Bm9vnzHVRd
— Ayuntamiento Córdoba (@ayuncordoba_es) May 16, 2020
El veterano dirigente ha muerto en Córdoba, la ciudad de la que fue alcalde entre 1979 y 1986, un periodo en el que se ganó el sobrenombre de «el califa rojo» en los medios de comunicación. También llegó a los máximos puestos orgánicos, ya que alcanzó la secretaría general del Partido Comunista de España (PCE) en 1988 y fue nombrado coordinador general de Izquierda Unida un año después. En 1989 se presentó como candidato a las elecciones generales y ganó su primer escaño. Bajo su mandato la formación alcanzó un pico electoral, cuando cosechó el récord de 21 diputados en el Congreso al presentarse a las elecciones generales.
Al histórico dirigente se le deben tesis políticas como las de las «dos orillas» o la célebre frase «programa, programa, programa» que aún sigue usándose y que incide en la importancia de los pactos políticos basados en propuestas programáticas. En los 90 también desarrolló la teoría del «sorpasso» con respecto al PSOE, que volvería a la actualidad política más de una década después.
Su «corazón rojo» ya le había dado algún disgusto. En 1993, en plena campaña electoral, sufrió su primer infarto en Barcelona, un episodio que se repetiría en 1998 y que acabaría en 1 una operación de corazón en la que se instaló un triple bypass en 1999.
En los últimos años, Anguita había abandonado la vida política, pero continuaba compartiendo sus reflexiones en libros, artículos o charlas. En 2012 participó en la fundación del Frente Cívico junto a otros activistas. Defensor siempre de la confluencia de la izquierda política y los movimientos sociales, de la «unidad popular», también lo fue del encuentro entre IU y Podemos en sus momentos más tensos. De hecho, en 2016 participó en la campaña conjunta de Unidas Podemos en algunos actos como por ejemplo acompañando en Córdoba a su amigo y compañero en el PCE, Manolo Monereo, colaborador de este medio. En 2018 rechazó la propuesta de Unidas Podemos de formar parte del Consejo de Estado.
El dirigente concedió una de sus últimas entrevistas a cuartopoder hace apenas un mes.
En esta ocasión, el histórico dirigente no ha podido superar el último pulso de su corazón, dejando huérfana a una parte de la izquierda española.
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