Las listas de espera se disparan en Andalucía

El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Moreno Bonilla / JUNTA DE ANDALUCÍA

El gobierno de Moreno Bonilla sigue jugando con la salud y con la vida de los andaluces.

Su gestión en materia sanitaria es la peor en décadas con diferencia.

por Antonio Barreda

Martes, 16 de abril de 2024. De nada le vale contarnos que nunca antes se había invertido tanto dinero en sanidad si la gestión de todos estos recursos lleva a la quiebra del sistema público sanitario. No hay nada peor que un gobierno que tenga abandonada a su suerte en materia sanitaria a su población.

En la campaña a la presidencia de la Junta de Andalucía de 2018 prometió, en el debate de candidatos en Canal Sur e incluso lo puso en su cuenta personal de Twitter, que iba a acabar con las listas de espera. Prometió 60 días para una intervención quirúrgica, 15 días para consultas externas, 10 días para pruebas diagnósticas y demora cero en procesos diagnósticos. Hechos que se han demostrado que eran la mayor mentira contada a los andaluces en su historia.

La mala gestión sanitaria repercute en la vida de los andaluces

Su gestión sanitaria está empezando a ser un auténtico peligro para los andaluces y andaluzas. Porque es nuestra salud y la de toda nuestra familia la que está en juego y, en último término, nuestra propia vida. Y eso no tiene precio. Ya no vale la ingente cantidad de mentiras que nos cuenta a través de sus medios afines cebados con abundante dinero público. Ya no valen los mantras de las falsas bajadas de impuestos y las políticas fiscales. De nada vale eso si nuestra vida es la que empieza a peligrar con las políticas sanitarias de Moreno Bonilla.

A estas alturas ya podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que estamos ante el peor presidente de la historia de la autonomía de Andalucía. El pueblo andaluz no salió en masa a la calle el 4-D ni el 28-F para empezar a temer por su vida en materia sanitaria. Los retrasos en los diagnósticos de enfermedades repercuten en nuestra vida. Un diagnóstico tardío que un paciente ha recibido con retraso por errores o demoras, que están más relacionadas con la gestión de los sistemas sanitarios, puede ser una sentencia mortal. Y eso es lo que está en juego ahora.

La sanidad fue la excusa para llegar al poder en 2018

Mientras la sanidad pública en Andalucía está entrando en una espiral de destrucción sin precedentes, el gobierno regional se va a los toros y a todas las fiestas de primavera que empiezan por Andalucía. Entre rebujitos, manzanillas, bailes de sevillanas por medio y demás, esconden lo poco que les importa la gestión de los problemas sanitarios del pueblo que votó un cambio en las urnas en diciembre de 2018.

A pesar de derivar ingentes cantidades de presupuesto de la Junta de Andalucía hacia la sanidad privada con la excusa de aliviar las listas de espera, éstas no han bajado, sino que, al contrario, han aumentado. Y lo último que hemos visto es el intento de pasar a la gestión privada del último viceconsejero de Salud de Moreno Bonilla, lo que dice mucho de lo que le importa la salud de los andaluces. Las listas de espera han aumentado exponencialmente con su gestión y nada tapona su hemorragia.

Sea el primero en desahogarse, comentando

Deje una respuesta

Tu dirección de correo no será publicada.


*


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.